
Reducir la factura de la luz
El recibo de la luz subió, por última vez, el 1 de octubre. Ya van cuatro subidas sólo en 2013… y aún no ha acabado el año. Así que, ya sabéis, poned en práctica los trucos infalibles de toda la vida: luces apagadas cuando abandones una habitación, nada de poner la tele para que haga compañía y apagad todos los stand-by antes de ir a dormir.
Hay más cosas que podemos hacer para pagar menos, siempre hablando de nuestra vivienda habitual. En 2009, el Ministerio de Industria, Energía y Turismo puso en marcha el bono social, un plan para «favorecer a los colectivos más vulnerables», es decir, 1) los clientes domésticos en cuyas residencias tengan una potencia contratada inferior a 3 KW; 2) los pensionistas con prestaciones mínimas; c) las familias numerosas con rentas bajas y d) los hogares en los que todos sus integrantes se encuentren en situación de desempleo. Aunque, en principio, esta congelación tarifaria sólo se aplicaba hasta 2012, lo cierto es que aún sigue en vigor.
¿Puedo tener el bono social en mi casa?
Si la potencia que tienes contratada es de 3,6 KW –puedes verlo en una factura de tu compañía–, hazte una simple pregunta: ¿mi casa puede funcionar igual con 3 KW? Lo más probable es que la respuesta sea afirmativa, así que sí, podrías beneficiarte del bono social. Llama a tu distribuidor eléctrico, solicita la reducción de potencia y, una vez reducida, automáticamente se te aplicará la tarifa vigente en 2009.
Yo reduje mi potencia hace años y podía funcionar en casa con normalidad. Eso sí, has de organizarte y tener en cuenta que no puedes poner la lavadora y el horno a la vez, por ejemplo. El único problema que encontramos fue la secadora: el ciclo 1 hacía saltar siempre el automático, aunque fuera lo único encendido en toda la casa. ¿Solución? Utilizar el programa número 2, que seca igual pero con algo menos de temperatura. Para mí no es algo insuperable, aunque si esto no lo llevas bien, piénsatelo dos veces. El trámite es sencillo, así que puedes probar y, si ves que no te apañas, volver a tu potencia anterior y listo.
Si no tienes una potencia contratada menor de 3 KW pero cumples alguno de los otros supuestos, siempre que no superes los 10 KW contratados, solicita por escrito a tu distribuidor de electricidad la aplicación del bono social. Enlazo la resolución, de donde puedes descargar los modelos para las opciones b) pensionistas con prestaciones mínimas, c) familias numerosas, y d) todos los miembros del hogar en situación de desempleo. Debes entregar, además del certificado específico que atestigüe cada una de esas situaciones, fotocopia del DNI del titular del punto de suministro de electricidad, certificado de empadronamiento del titular del punto de suministro, fotocopia de la última factura y declaración de la veracidad de la documentación presentada.
¿Qué más? Dos cosas importantes: el plazo máximo del que puede disfrutarse este descuento es de 2 años, y los usuarios tienen obligación de comunicar cualquier cambio en su situación que les invalide como beneficiarios del mismo. Avisados estáis.
¿Cuánto ahorro con esto?
El bono supone una aplicación de las tarifas de 2009, lo que significa que no es que pagues menos luz de la que utilizas, sino que pagas menos impuestos por esa luz utilizada. Por tanto, el ahorro depende en parte de tu consumo. La Organización de Consumidores y Usuarios, la OCU, calcula en este artículo que ahorras un 23%, lo que supone unos 180 euros al año. Aunque pueda parecer poco, yo soy de las que opina que todo cuenta, todo suma, y por poco ahorro que suponga, piénsalo de otro modo: tendrás 180 euros al año para gastarlo en cualquier otra cosa. Sólo por eso, ya vale la pena.
Nuevas propuestas
Buscando ese cálculo, me he topado con la propuesta «Quiero pagar menos luz», también de la OCU. La idea es hacer una compra colectiva de energía para poder presionar a las compañías y lograr un menor precio. Puedes inscribirte gratuitamente y sin compromiso, sólo dejando tu número de teléfono para que te informen de la campaña o, si lo prefieres, llamando tú al 900 900 359. Este mes se llevará a cabo una subasta entre las distintas distribuidoras y se comunicará a los inscritos el precio logrado. Será en ese momento cuando tengamos que decidir si aceptar la oferta o seguir con la empresa que ya tenemos contratada. Yo ya me he apuntado.
Hoy sólo hablamos de ahorrar en el precio pero, en otra entrada, hablaremos de otras eléctricas: energías alternativas, cooperativas o pequeñas distribuidoras. Prometido.